10.- C-3PO - Juan García



Uno de los personajes perennes de la serie Star Wars... Y también uno de los más anodinos. Si bien en la trilogía original era, junto a R2-D2 el aliño cómico, pero tras tantas películas de la saga galáctica por excelencia, lo cierto es que ya cansa y no hace demasiada gracia. C-3PO es un personaje plano y sin evolución, y ya lo conocemos demasiado como para nos sorprenda... Basta con decir que su aportación más memorable en los últimos años es tener un brazo de color rojo.

9.- Capitán Phasma - David Soriano



La nueva trilogía ha introducido grandes personajes... y otros que no tanto. Cuando supimos que Gwendoline Christie, de Juego de Tronos, iba a interpretar a un stormtrooper con un particular uniforme plateado, pensamos que podía por fin ser un personaje femenino importante para la saga. El Despertar de la Fuerza dejó en mal lugar al personaje, que supuestamente se redimiría en Los Últimos Jedi. La realidad es que simplemente acabó siendo un intento de cebo para vender merchandising, pero sin el encanto de los Porg o BB-8.

8.- Vicealmirante Holdo - Juan García



Lo cierto es que no entendemos demasiado bien las motivaciones de este personaje en Star Wars VIII: Los Últimos Jedi. No por su objetivo final, que es salvar a la resistencia, sino a la hora de ocultar información a los miembros de su tripulación. ¿Qué motivo tenía para no contarle lo que quería hacer a Poe Dameron y compañía? Si lo hubiera hecho, nos habría ahorrado la trama del casino y, posiblemente, se habrían ahorrado vidas... ¿Y por qué vas vestida así? ¿De qué fiesta trasnochada vienes?

7.- Watto - David Soriano



Si hay un personaje verdaderamente odioso por su baja moral, ese es Watto. El chatarrero de Tattoine tuvo esclavizados a Anakin y su madre Shmi, usó sus trucos sucios para intentar ganar apuestas, era inmune al control mental de los Jedi y provocó demasiadas víctimas tratando de amañar la Carrera de vainas del Episodio I. Además de ser despreciable por sus actos, su apariencia no lo mejoraba, pues era una especie de cucaracha nariguda con alitas y demasiado CGI en esa época en la que George Lucas era adicto a ello.

6.- Padme Amidala - Juan García


 Natalie Portman on Getting Back in That Amidala Makeup for SNL

Un personaje de importancia capital para la historia de Star Wars... Y también otro de esos personajes a los que no le vendría nada mal un poco de sangre. Amidala es bastante indolente y, por momentos ridícula en sus reacciones. Además está el hecho de que acaba enamorándose del rarito de Anakin, cosa que tampoco entendemos ni un poquito...

5.- Rose Tico - David Soriano



La supuesta gran incorporación a Los Últimos Jedi acabó siendo la gran molestia de la película. Se ve que el estudio no tenía las ideas muy claras para con Finn y decidió asignarle misiones junto a esta miembro de la Resistencia que no había tenido tareas más heroicas que las de encargarse del mantenimiento. Ni siquiera su trasfondo personal con la pérdida de su hermana Paige consiguió hacernos sentir lo más mínimo por su personaje. Prescindible y aburrido, como la historia de amor con Finn continúe en el Episodio IX, nos va a dar ganas de vomitar. Una pena, porque nos encanta Kelly Marie Tran.

4.- Anakin Skywalker - Juan García



Piensa en Anakin de niño, o de adolescente, en cualquiera de los dos casos se trata de un personaje abominable. Cuando está interpretado por Jake Lloyd es tan insulso como lamer un clavo, y cuando está encarnado por Hayden Christensen no llegamos a entender muy bien sus motivaciones, siendo más un 'niño rata' con reacciones infantiles que un jedi poderoso. Al menos, cuando es Darth Vader (SPOILER) arregla la papeleta y al final logra una gloriosa redención que trae un aparente equilibrio a la Fuerza.

3.- Líder Supremo Snoke - David Soriano



Una nueva trilogía necesitaba de un villano a la altura. Todos sabíamos que ahora quien partía el bacalao era el Líder Supremo Snoke y el halo de misterio que envolvía su participación holográfica en el Episodio VII nos llevaba a querer saber más de él, pues en teoría era quien iba a acabar de corromper a Kylo Ren para que dejara de ser el niño pataletas. Lo consiguió (y probablemente por ello no figura aquí el personaje de Adam Driver), pero haciendo que tuviéramos uno de los personajes con menos peso en dos películas consecutivas al que asesinaron como su fuera un becario del Lado Oscuro. El lado maligno de la Fuerza se merecía algo mejor que este villano de Hacendado.

2.- Los Ewoks - Juan García


Why Blowing Up the Star Wars Expanded Universe Was a Good Thing

Podríamos empezar diciendo que esta raza de seres achuchables es una de las razones más importantes para que nos alegremos de que Disney se cargara el universo expandido de Star Wars. Son como wookies sin gracia, ni poder que, de algún modo incomprensible, acaban derrotando a un Imperio tecnológicamente más avanzado. No se salva ni Wickett de la quema. Al fin y al cabo se trata de una raza que MUY probablemente fue concebida para arrasar como merchandising, y no por razones de peso argumentales.

1.- Jar Jar Binks - David Soriano



¿Había alguna duda de que el gungan del Episodio I iba a ser el personaje que encabezase nuestro Top? El personaje, que más tarde confesaron que fue inspirado por Goofy es igual de torpe y ridículo que su inspiración. En una época de Star Wars pre-Disney, hoy en día seguimos sin entender la decisión de incluir a este larguirucho creyendo que sería el descargo cómico perfecto. Hay cosas buenas en La Amenaza Fantasma, como la Carrera de vainas y el Duelo contra Darth Maul. Jar Jar se cargó este renacer de Star Wars e hizo que odiásemos las precuelas desde su entrega inicial. Ni siquiera nos dieron el consuelo de verlo morir en alguna de las películas de la trilogía de orígenes.